Los estudiantes de escuelas técnicas con orientación en la mecánica automotriz realizarán su capacitación profesional con equipos y componentes con tecnología de última generación, tras la donación realizada por la Fundación Señor González de un motor Toyota 2.8 turbo para la Escuela Misión Monotécnica Nº44 de la localidad de Campo Afuera, en Albardón.

A través de un convenio entre el Ministerio de Educación y la Fundación, en las Aulas Taller Móvil (ATM) se desarrollarán cursos de mecánica y automotores, soldadura, plegado, entre otras actividades de formación profesional. Las unidades móviles se ubicarán en las instalaciones de la Fundación Señor González.

El principal objetivo es el desarrollo de prácticas en taller, de esta manera los estudiantes podrán aprender teniendo en cuenta el avance de la tecnología aplicada en la industria automotriz, la injerencia de la electrónica y la hidráulica como asistentes de los sistemas y subsistemas mecánicos en los motores.

El propósito es incentivar y desarrollar las habilidades técnicas y científicas de los estudiantes, permitiendo la transferencia de los aprendizajes a situaciones concretas y reales, tanto para generar mejoras en los procesos de enseñanza, como un mayor interés por la investigación aplicada.

El presidente de la Fundación, José Luis Gonzalez, destacó que esta entidad tiene entre sus objetivos apoyar la educación técnica, media y superior, con el espíritu de facilitar la inserción al mundo laboral de los jóvenes.

El director de la escuela, Carlos Testa, manifestó su agradecimiento expresando: “Es un gran aporte, la escuela está muy bien equipada, pero esto es fundamental para las prácticas con tecnología que es lo que está en estos momentos en el mercado y es lo que ellos se van a encontrar cuando egresen”.

El ministro De Los Ríos puso en valor el trabajo de la Fundación y destacó el beneficio que tendrá para los estudiantes el equipo y la capacitación: ”La formación técnico profesional requiere no solo del conocimiento, además del trabajo en el taller y el laboratorio. Allí las herramientas deben ser vinculantes a la tecnología. Las fundaciones tienen que ver con la responsabilidad empresaria y cuando tienen entre sus objetivos la educación es que se están ocupando del futuro. Los chicos que están hoy en el sistema formativo, a pesar de la pandemia, serán los profesionales en un oficio o seguirán en la universidad. La economía del conocimiento requiere el compromiso de todos. Esta Fundación posibilitará que los estudiantes adquieran el saber hacer con herramientas, instrumentos y equipos con tecnología de punta aprendido con equipos además de la teoría”.