Cultura Arte & pop
Ana Pelichotti: “En el mundo, no existen escuelas públicas y gratuitas de cine. La ENERC es una apuesta cultural en Argentina”.
La Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (ENERC) nació con la Ley de Cinematografía que creó el Instituto Nacional de Cine en 1957, que se puso en marcha en el año 1965. Una de sus sedes se encuentra en la provincia de San Juan, Argentina y ha sido concebida como el resto de las sedes, como parte de un plan estratégico de fomento y federalización impulsado por el INCAA y el Gobierno Nacional garantizando una educación cinematográfica a través de una escuela pública, nacional y gratuita.
Desde Ahora San Juan estuvimos en contacto con Ana Pelichotti, Vicerrectora de la Sede ENERC Cuyo (San Juan, Mendoza, San Luis, La Rioja), quien cumple un rol administrativo y académico. Pelichotti es una reconocida realizadora cinematográfica, guionista, productora y montajista.
La escuela funciona como sede de ENERC Cuyo (San Juan, Mendoza, San Luis, La Rioja) desde el año 2016 en la provincia de San Juan, Argentina, ese fue el primer año de apertura. A partir del 2019 se terminó la construcción del edificio, que permitió un espacio propio. Anteriormente funcionaban en el Complejo Ferro Urbanístico, en el en el predio de Eva Perón.
“El nuevo espacio brindó ciertas cosas que son muy específicas, como un set, una isla de edición, una sala de multiusos para proyectar, para reuniones de trabajo, de equipo, entre otras”, destacó Ana.
Actualmente la ENERC cuenta con 5 Sedes: Sede AMBA, Sede NEA, Sede NOA, Sede Cuyo y Sede Patagonia Norte.
En la actualidad conviven en las sedes de la ENERC dos planes de estudios:
- La formación integral en Realización Cinematográfica y Audiovisual que se desarrolla en las Sedes Regionales (carrera: Realización Cinematográfica Integral).
- La formación especializada en diversas carreras cinematográficas que se desarrolla en la Sede Metropolitana son: Realización Cinematográfica, Guion Cinematográfico, Producción Cinematográfica, Dirección de Fotografía, Dirección de Montaje, Dirección de Sonido y Dirección de Arte.
– ¿Qué Carrera se dicta en la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (ENERC)?
Ana Pelichotti: La carrera es un terciario superior avalado por el Ministerio de Educación y depende del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales y del Ministerio de Turismo y Cultura de la provincia de San Juan.
“El realizador integral tiene una mirada holística, trabaja en todas las áreas, pero fundamentalmente en el desarrollo de guión, producción y dirección”.
-¿Qué ofrece la ENERC para los estudiantes que deciden ingresar?
Ana Pelichotti: Yo creo que lo que ofrece la escuela es mucho más de lo que esperan los estudiantes o los que aplican, pueden llegar a esperar en su imaginario, porque al comienzo todos vienen con la idea de dirigir o de efectos especiales y después comienzan a descubrir otros mundos como el diseño sonoro, el montaje y las especializaciones, como la dirección de arte, que es algo que como espectador uno no fracciona.
Lo que vos haces cuando empezas a estudiar cine o cualquier otra arte es empezar a fraccionar los elementos de lo que estás viendo, pasas se ser un consumidor de un todo a un consumidor global. En la Escuela ves eso fraccionado, pero al mismo tiempo, cómo convertirlas en sincréticas, digamos, unificarlo en este lenguaje sincrético que es el cine.
Por un lado tenés todo más artístico y por otro lado lo audiovisual es una industria absolutamente prolífica y además en crecimiento continuo, explicó Pelichotti.
“La parte de la industria es lo más difícil del aprendizaje de la apreciación”.
La otra parte que resulta difícil,que parece simple, pero no lo es, es pensar qué queres contar. Tu punto de vista autoral y tratamos de trabajar fuertemente en esos elementos, principalmente porque tenemos una planificación que se cumple más allá de los colores politícos, porque la idea es trabajar en la región, para la región y que las personas cuenten una historia desde su mirada autoral.
Y pueden hacer ciencia ficción acá, una de zombie acá. No estoy hablando de contar las historias comunes que el imaginario también cree que debemos contar, sino elegir nosotros cuáles son los temas. Eso es lo más difícil, pero no solo en el cine, sino en la literatura, en la pintura, en la música. Encontrar algo distintivo, identitario, que vos puedas reflejar en una historia y a partir de ahí poder narrar con estos elementos del lenguaje y después poder incentivar a espectadores y a salas y demás que lo promuevan”, destacó Ana.
“Es una cadena enorme. Tal vez, cuando alguien viene a estudiar cine, no lo tiene en mente. Viene porque ya tiene una inclinación contar historias de esta manera y considera que su cabeza funciona a través de este lenguaje. Pero bueno, la carrera trabaja todos esos instrumentos”.
–La formación teórica y práctica que se imparte al alumnado procura desarrollar, dentro del proceso de aprendizaje, una preparación y ejecución rigurosa, acorde con la realidad cinematográfica industrial de nuestro país, según nos contas. ¿Cómo es posible esto?
Ana Pelichotti: En el mundo no existen escuelas públicas y gratuitas de cine. La ENERC es una apuesta cultural, que en otro país no existe. No existen las estructuras que la sede tiene y que la ENERC tiene, en ningún lado del mundo.
“Estudiar cine es carísimo. Es una de las carreras privadas más caras. Juntas con medicina y odontología. Es caro. Es caro porque es una industria cara. Estamos hablando de costos medios de una película de 70 millones, para arriba.”
Eso como base. No para hacer una película sin figuras, sin estrellas, sin tantas locaciones, cuatro semanas de rodaje. Algo muy básico. Es una industria que la producción es cara. Pero bueno, los réditos y los beneficios y el mundo económico que se mueve en cine también genera esos niveles de ingresos.
Esta es Escuela es pública. No solo es gratuita, sino que a medida que transitas tenés, por lo general, 4 o 5 curriculares que son obligatorios de terminar, de los cuales 3 tienen una ayuda económica de caja. Y la escuela te da los equipos. Posiblemente vos tengas que conseguir cosas afuera: lentes que no tenés, unas cositas para fotos que no tenés, algunas cosas de arte y demás. Pero la Escuela te pone los fierros duros para tu práctica, para el aprendizaje. Eso no existe en ningún lugar del mundo que funcione de esta manera, enfatizó nuestra entrevistada.
–Con respecto al financiamento del Cine ¿Cómo se lleva a cabo este proceso?
Ana Pelichotti: Las partidas presupuestarias con las que se financian son diferentes y en su mayoría son pagadas por los mismos espectadores que consumen los productos audiovisuales. Ahora con plataformas, que hay que terminar de instrumentar eso, pero las salas y la entrada al cine las paga la gente, las pagas vos, las pago yo. Por eso es muy importante el ir a ver cine argentino. Pero igual cuando vienen los tanques de Hollywood, igual esa entrada financia parte del cine y financia un montón de otras actividades también.
La mayoría de la gente cree que el cine es por combustión espontánea. No existen las cosas por combustión espontánea. Se hacen por política. Y la política puede trascender a cualquier color partidario. Y eso tiene que quedar claro. Porque eso tiene que ver con: primero, lo que es el patrimonio o el acervo audiovisual o cultural o esto que yo digo, identidad.
“Porque es una industria impresionante que genera efectos multiplicadores en la economía instantánea”.
Por cada millón de pesos que pones, 750.000 quedan girando en el lugar, en los técnicos, en las empresas que proveen todas estas actividades secundarias. Y además, genera un montón de cosas asociadas. El cine no vive por las películas solamente. Vive por el chocolate, el merchandising, de todas las cosas que son transmidas o parejadas al producto”.
Pero vivimos en un mundo audiovisual en donde creemos que hacer una película es por combustión espontánea y nos parece muy caro.
Y también tenemos un sesgo en el que nos parece muy bien que Estados Unidos hable de millones y millones de dólares para pagarle a una figura y no que un estado provincial, municipal o nacional asigne dinero para fomentar una historia local”.
Hay como cosas que educar, hay cosas que transformar. Pero lo importante es que la transformación necesita una decisión política. La Argentina la ha tenido desde el momento en que institucionalizó el Instituto de Cine. Y se puede hablar de mejorar el mecanismo o de cómo se distribuyen los recursos, podemos discutir un montón de cosas. Lo que no podemos discutir es que si no existiría cine argentino, nunca hubiéramos visto a Ricardo Darín hacer todas las películas que hemos visto y que hemos disfrutado, por poner un ejemplo.
–Con respecto a la nueva propuesta de poder ver tesis de la ENERC en el Teatro Municipal de San Juan. Nos comenta acerca de ello.
Ana Pelichotti: A principio de este año hicimos una presentación con las tesis del año pasado, que por agenda los terminaron muy tarde, veníamos de pandemia, con calendarios retrasados. Pero este año, la primera presentación va a ser sin duda, la primera muestra que hacemos para el acto de colación, que siempre por una cuestión de cupo de gente, de sillas, de un montón de cosas, solemos hacerla en un espacio del Ministerio de Turismo y Cultura y después si ya planificamos con el espacio del Municipal.
Se estan pasando en el Municipal, junto a un convenio que tiene el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCCA), de poder pasar un cortometraje, siempre que se pase un largometraje de estreno, pero no solo de nuestra sede, de diferentes sedes y de diferentes producciones nacionales, porque el Instituto de Cine tiene diferentes concursos y diferentes líneas de financiación para producción también de cortometrajes, de ficción, de documental y de animación. Entonces, cada vez que vayas a ver un largometraje al Municipal, posiblemente te encuentres con algún corto de nuestra sede, algún de otras sedes, que no estaría mal también, escuchar esa tonada de Formosa o ver una historia con el paisaje de Jujuy o de personajes de Neuquén, o bien, podes encontrarte con otras historias breves, que van surgiendo antes de eso.
–¿Cómo se pueden inscribir los interesados en la ENERC?
Desde agosto se hará la prescripción para poder entrar a través de un sistema de auto gestión. Van a tener diferentes módulos con contenidos que van a tener que ir pasando y recién en el mes de octubre y noviembre va a haber una autoevaluación. Lo bueno es que vas a tener ahí un montón de material asociado a guion por ejemplo no solo lecturas sino contenidos de podcast de otras producciones, entrevistas de estudiantes, egresados, de instructores y en noviembre/diciembre se va a fijar una fecha para el examen. A partir de ahora, en breve, estamos largando la promoción de las inscripciones y demás, se van a poder inscribir hasta días previos al examen.
La idea es que puedan según el tiempo de cada uno organizarse para transitar todo ese proceso de ingreso, y por supuesto en la escuela la sede siempre está abierta para cualquier consulta. La Escuela tiene instrucores de la región, de la provincia, y de otras, que tiene que ver con el quehacer de su oficio.
Actualmente ingresan a la ENERC 182 alumnos (112 en las cuatro sedes regionales y 70 en la sede central).
La formación es absolutamente gratuita y la institución provee a los estudiantes de todos los recursos y elementos necesarios para desarrollar los trabajos prácticos, los ejercicios curriculares anuales y las tesis de graduación.
Las clases son dictadas en grupos pequeños y con un seguimiento intensivo de cada instructor sobre los estudiantes así como con permanentes prácticas y accesos a los equipos de rodaje y posproducción que puede utilizar durante toda su formación.
@Ahora Sanjuan
/Imagen principal y contenido: ©fotos gentileza
Cultura Arte & pop
Dillom triunfó en los premios MTV Europe Music Awards 2024
El cantante, que también está nominado al Latin Grammy, celebró la estatuilla la cual es votada por millones de seguidores alrededor del mundo. El reconocimiento se da luego de que el compositor se cruzara con «La Pistarini», el militante libertario que lo insultó en un vuelo.
A los días movidos que tuvo, ahora se le suma un gran triunfo: el cantante y rapero Dillom ganó su primer premio MTV: en esta ocasión, triunfó como «Mejor Artista Latinoamericano Sur» en los Europe Music Awards 2024 (EMAs), que se celebraron en Manchester, Inglaterra.
Gracias a su álbum conceptual Por Cesárea, el cual fue aclamado por la crítica especializada por jugar con el postrock, el hip hop y el pop con tonos oscuros y sombríos, el compositor venció a sus colegas de la categoría como Emilia Mernes, Luck Ra, María Becerra y Trueno.
A su manera, el intérprete mandó un video en vertical, mientras que él está posicionado de manera horizontal, y agradeció a todos sus fanáticos y seguidores que lo votaron en la terna. «Muchísimas gracias a toda la gente que me votó, vamos Argentina y gracias por este hermoso premio», sentenció.
Y esta semana recién empieza para el también productor, ya que está nominado por primera vez a los Latin Grammy en la categoría «Mejor Álbum de Música Alternativa». La gala será este jueves 14, desde el Kaseya Center de Miami.
El más que reconocido merecimiento, que se da en medio de una intensa gira por el país y por otros países de América Latina, sucede luego del cruce con el troll libertario «La Pistarini».
Resulta que el twittero ultraderechista había subido a la red social una foto del cantante sentado en el avión, acompañada de insultos hacia su persona. El momento en el que el cantante se acercó a increparlo se volvió viral.
«Lo último que me faltaba, coincidir en el vuelo con el pelotudo de Dillom«, había escrito en su cuenta el usuario @La_Pistarini —en la vida real, se llama Juan Carlos Siber—, quien en posteos anteriores había manifestado opiniones en contra de los inmigrantes, a favor de Javier Milei y Donald Trump. Sin embargo, no tuvo en cuenta que el rapero de 23 años advirtió enseguida ese contenido y quedarse en silencio no era una opción
La respuesta de Dillom
Primero, Dillom comentó el mismo posteo e invitó al twittero a un intercambio cara a cara. «Deci qno tenes foto de la cara sino te busco y te doy un sopapo (sic)», comentó el rapero y aseguró que ante una primera ronda de preguntas respecto a quién había sido el autor del contenido «no se hizo cargo ninguno».
Con celular en mano y después de intercambiar mensajes con algunos de sus seguidores, que lo ayudaron a identificar al provocador, el autor del hit «Cirujía» se levantó de su asiento para dar con él. «¿Vos sos Pistarini? ¿El que sube fotos mías a Twitter? ¿Tenés algún problema?», le dijo Dillom al twittero libertario.
«Ninguno capo, andá tranquilo», le respondió el hombre, que siempre permaneció sentado en su butaca, intentó dejar de ser grabado al tapar con su mano la cámara y estaba visiblemente incómodo por la reacción del cantante.
«Te arranco la cabeza, ah mira que guapo que sos, pelotudo, portate bien, ¿dale?», fueron las últimas palabras de Dillom para cerrar el intercambio. «Así de guapos son en persona», fue la reflexión final del artista unos momentos más tarde.
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Cultura Arte & pop
Prendas tradicionales rusas en el Museo Provincial de Bellas Artes de San Juan.
Se exhibieronn prendas tradicionales para niñas y mujeres, junto a reproducciones fotográficas de cuadros clásicos del siglo XIX y XX donde está presente el uso del “kokoshnik” – diadema rusa – acompañados de texto explicativo.
La muestra estuvo en pensada inicialmente del 1 al 15 de Octubre, pero se extendió hasta el lunes 21. La misma se realizó en el Hall Central Museo Provincial de Bellas Artes Franklin Rawson con entrada libre y gratuita.
Los trajes típicos se basan en el “sarafán”, un vestido sin mangas, largo y de línea trapezoidal con tirantes que se usa con una camisa blanca de mangas largas.
Está presente la “rubakha”, variante antigua de la camisa contemporánea que podían usar tanto hombres como mujeres..
Kokóshnik: la evolución de la diadema rusa
En la antigua Rus las mujeres no llevaban sombrero, eran cosa de hombres. Las mujeres tenían sus propios tocados, más bellos y cómodos: los ‘kokóshnik’. Estaban hechos de materiales delicados, como seda o terciopelo y se decoraban con perlas, encajes, piedras y bordados de hilo de oro.La palabra kokóshnik viene del término eslavo kokosh, que significa “pollo” o “gallo”. Esos antiguos tocados rusos en forma de cresta (de abanico o de pantalla circular) han sido durante mucho tiempo un símbolo de la moda rusa.
En su estructura, el kokóshnik es un abanico ligero hecho con papel grueso y una cinta metálica o corona, cosidas a un sombrero o una redecilla. La base estaba hecha de damasco (tejido con brocados ornamentales) o terciopelo rojo sobre una superficie dura hecha de tela o cartón, que o bien se pegaban o bien se acolchaban juntas.
En la parte superior, la cresta se decoraba con ornamentos: flores frescas o artificiales, brocados, encajes, cuentas, perlas de río (a partir del siglo XVI se recolectaban en el lago Ilmen), hilos de oro, láminas, vidrio o piedras preciosas. El cuello solía cubrirse con hilos de oro bordados.El kokóshnik tenía un fondo de tela. Se fijaba por detrás a la cabeza mediante cintas. Al colocarlo, el kokóshnik solía empujarse ligeramente hacia la frente, mientras que la parte de atrás solía cubrirse con una tela o una pieza añadida de terciopelo carmesí, y se sujetaba con cintas.
Sobre los kokóshnik se solían poner chales de seda o lana que se bordaban con frondosos adornos hechos con unos pañuelos de oro o plata, es decir, losubrús; una manta ligera y delgada decorada con encajes bordados o un velo. El pañuelo se ponía en diagonal y se sujetaba bajo la barbilla. Un largo velo hecho de gasa o seda se fijaba bajo la barbilla o bajaba desde la parte superior del kokóshnik hasta el pecho, los hombros o la espalda.
La forma del kokóshnik variaba mucho de una región a otra, pero tendía a depender de las particularidades de la costumbre de recoger el pelo en un arnés o dos trenzas: alrededor de la cabeza sobre la frente, por el cuello y las sienes, etc.Varias láminas, cortes, coberturas del cuello y otros detalles, que variaban mucho según la región rusa, servían de diseños y decoraciones adicionales. Sin embargo, todas se mantenían sobre una base dura, el kokóshnik. En tiempos más recientes, la tradición de vestir el kokóshnik perduró como complemento nupcial hasta la década de 1920. La joven novia vestía este tradicional tocado desde el día de su boda hasta el día en que nacía su primer hijo. Entonces, solo podía lucir el kokóshnik en ceremonias especiales o los días festivos.
Pedro el Grande prohibió a las mujeres nobles que vistieran el kokóshnik mediante un decreto real. Pero regresó a la moda de la corte femenina de la mano de Catalina la Grande, quien promovió la moda à la russe en la conciencia del siglo XVIII, y lo trajo de vuelta a las fiestas de disfraces.
Las guerras napoleónicas inspiraron un renovado interés por las vestimentas tradicionales. Entre 1812 y 1814, los vestidos rusos rojos y azules (los sarafán) volvieron a estar de moda./ La emperatriz María Fiódorovna con un kokóshnik con tiara de diamantes, alrededor de 1880.
Los vestidos de baile de la corte de principios del siglo XX y la imaginación de los diseñadores rusos y los modistos emigrados incrementaron de forma significativa la popularidad de los kokóshnik.
El Sarafán: Un símbolo de la feminidad rusa
El sarafán es una prenda femenina rusa tradicional que ha sido usada por las niñas y mujeres en las zonas rurales de Rusia desde el siglo XVIII. Este vestido sin mangas es largo y tiene una línea trapezoidal, con tirantes. Se acompaña de una camisa blanca de manga larga y a menudo se ceñía a la cintura con un cinturón de tela. El sarafán fue especialmente popular en el centro y norte de Rusia, así como en las regiones del Volga.El nombre sarafán proviene del persa sarapa, que significa de la cabeza a los pies. El sarafán fue usado por las mujeres campesinas, pero las clases altas abandonaron esta prenda en favor de la moda europea occidental.
El sarafán es una prenda icónica en la vestimenta tradicional rusa y tiene un significado simbólico en la cultura del país. Este vestido delantal era considerado un símbolo de feminidad y se asociaba con la modestia y la pureza. Las mujeres rusas solían usar sarafanes de colores vivos para ocasiones especiales como bodas y festivales, mientras que los sarafanes de uso diario eran más simples y de colores más apagados.
El sarafán también era una forma de expresar la identidad regional y social. Cada región de Rusia tenía su propio estilo y diseño de sarafán, con diferentes adornos y detalles. Por ejemplo, los sarafanes utilizados en los Urales tenían una forma trapezoidal y estaban decorados con botones o listones en el frente, mientras que los sarafanes sordos no tenían costuras en el frente y estaban hechos de una sola pieza de tela.Hoy en día, el sarafán se usa principalmente en representaciones de folclore ruso. Sin embargo, todavía se pueden encontrar versiones modernas de esta prenda en la moda contemporánea, con diseñadores que se inspiran en el sarafán para crear piezas únicas y elegantes.
La Rubakha
La vestimenta de los hombres era sencilla y constaba de algunas prendas básicas. Estos eran comunes tanto a los campesinos como a los nobles adinerados, aunque estos últimos a menudo tenían sus ropas hechas de materiales más caros, podían usar diseños sofisticados y también tenían sus ropas generosamente decoradas con piedras semipreciosas y bordados elaborados. Rubakha, o sorochka, era el nombre de la camisa que estaban hechas de lino o algodón, podían no tener cuello y, en la mayoría de los casos, tenían un «cuello torcido» (es decir, abierto hacia un lado); este tipo de camisa se llamaba kosovorotka. El cuello y los adornos de la camisa a menudo estaban bordados con hermosos diseños.La rubakha es el elemento básico de cualquier vestuario tradicional ruso, que podían usar tanto hombres como mujeres.
Por lo general, la rubakha se usaba con una faja o correa en la cintura que podía estar hecha de seda o lana y, a menudo, tenía borlas en los extremos. Los hombres mayores solían vestirse de manera más humilde que los jóvenes solteros. Aunque la vestimenta de los hombres no era tan elaborada como la de las mujeres, aún reflejaba la identidad y la cultura rusa
Las prendas pertenecen a la Casa Rusa de Buenos Aires, que es el centro de la cultura y las ciencias rusas en Argentina. Organizó Fundación FIPPE
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El oscuro legado de ‘El Cuervo’: cómo un disparo mortal consagró una de las películas de culto más relevantes
A 30 años desde su estreno, la historia de ‘El cuervo’ perdura entre sus seguidores con su profundo mensaje, en el que el amor verdadero es más fuerte que la muerte.
30 años después de su rotundo éxito, llega a los cines una nueva versión de ‘El cuervo’, protagonizada por Bill Skarsgard. Aunque el director, Rupert Sanders, aseguró que la película es más fiel a la novela gráfica original de James O’Barr, difícilmente alcanzará el nivel de éxito de la película de 1994, un clásico de culto que marcó un ‘legado maldito’ en la historia de Hollywood.
La película, estrenada el 13 de mayo de 1994, cautivó al público por la oscura atmósfera gótica recreada por el director Alex Proyas y la interpretación de Brandon Lee, que le aseguraron un lugar en la historia del cine. Sin embargo, fue igualmente recordada por la tragedia ocurrida durante su producción: la prematura muerte de su actor principal.
‘El cuervo’ cuenta la historia de Eric Draven, un músico que es brutalmente asesinado junto con su prometida. Un año después, es resucitado por un misterioso cuervo para vengarse de quienes le hicieron daño. El amor, la muerte y la sed de venganza fueron temas que calaron hondo en los espectadores, con un estilo visual marcado por paisajes urbanos lluviosos, más una banda sonora inquietante, que se desmarcó de varias superproducciones de la época.
‘El cuervo’ por siempre
Brandon Lee, hijo de la leyenda de las artes marciales Bruce Lee, que había empezado a hacerse lugar en Hollywood, fue el protagonista de ‘El cuervo’. Sin embargo, en marzo de 1993, durante el rodaje de una escena, Lee, de 28 años, resultó herido de muerte cuando el actor Michael Massee, que interpretaba a uno de los maleantes, disparó una pistola de utilería en la cual accidentalmente una bala había quedado en el cañón.
El tiroteo fue considerado un accidente. Sin embargo, Massee se tomó un largo año sabático. «Creo que nunca se supera algo así», declaró al programa de noticias Extra en 2005.
El incidente conmocionó a Hollywood y provocó cambios generalizados en los protocolos de seguridad de los sets de rodaje, especialmente en lo relativo al manejo de armas de fuego. A pesar de la tragedia, se tomó la decisión de completar la película, utilizando dobles y tecnología CGI para terminar las escenas restantes de Lee.
El éxito de la cinta fue agridulce, ya que tanto el público como la crítica alabaron el trabajo del actor al tiempo que lloraron la pérdida de una estrella que había estado a punto de alcanzar la grandeza.
Legado oscuro
A lo largo de los años, la trágica muerte de Lee ha desencadenado numerosas teorías conspirativas, con algunos fans y especuladores cuestionando el relato oficial de los hechos.
Una de las teorías más persistentes es la de que la muerte de Brandon fue parte de una «maldición» sobre la familia Lee. Esta teoría sugiere que las muertes prematuras tanto de Brandon como de su padre no fueron meros accidentes, sino parte de algo sobrenatural. El repentino fallecimiento de Bruce Lee en 1973 alimentó la especulación de que estaba maldito debido a sus supuestas conexiones con las artes marciales o porque desafiaba las prácticas tradicionales chinas. La teoría se extiende a Brandon, postulando que su muerte fue una continuación de esta supuesta maldición.
Las teorías de conspiración también fueron alimentadas por los extraños paralelismos entre la ficción y la vida real, con la trágica historia de fondo de O’Barr -quien creó el cómic luego de que su prometida fuera asesinada por un conductor ebrio- o la inminente boda del protagonista principal Eric y su novia Shelly, descrita en ‘El cuervo’, con el hecho de que Lee debía casarse con su propia prometida, Eliza, el 17 de abril de ese año.
Otro suceso que ha llamado la atención de muchos cinéfilos, es la gran similitud entre la muerte de Lee en el rodaje de ‘El cuervo’ y la muerte de la directora de fotografía, Haylna Hutchins, por el disparo de Alec Baldwin en el set de ‘Rust’. Ambas producciones cinematográficas se vieron ensombrecidas por tiroteos mortales que conmocionaron al público y suscitaron amplios debates sobre la seguridad en la industria.
«Ver que en los casi 30 años transcurridos entre las películas no habíamos mejorado eso fue ciertamente devastador», comentó Jeff Most, productor de ‘El cuervo’ (1994) en una entrevista concedida a The Guardian. «Como productor con más de 30 años de experiencia y numerosas películas de acción a sus espaldas, puedo asegurar que no hay lugar en el mundo en el que un actor sea responsable del arma que maneja», añadió, en defensa de Baldwin.
Tras el éxito de Lee como ‘El cuervo’, hubo secuelas olvidables. En algunas ocasiones, Bradley Cooper o Jason Momoa estaban previstos para interpretar a Eric. Aunque ningún proyecto ha logrado lo que la película inicial sí.
La historia de ‘El cuervo’ perdurará con su profundo mensaje, en el que se promete que el amor verdadero es más fuerte que la muerte.
@RT.
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