Durante unas excavaciones arqueológicas en Moscú, los arqueólogos encontraron un fragmento de un compás de hueso que data de finales del siglo 18 y principios del 19. Este hallazgo es único para Moscú, ya que nunca se habían encontrado antes artefactos de este tipo. Así lo informa el portal oficial del Alcalde y del Gobierno de Moscú.

Los especialistas ya han completado la restauración del instrumento, que incluye un eje de hueso con un montaje de latón y un soporte que conecta las partes. El compás será entregado al museo una vez que se complete la restauración de otros objetos encontrados.

Aleksey Emelyanov, jefe del Departamento de Patrimonio Cultural de la capital, señaló que este compás podría haber pertenecido a un estudiante o ingeniero de la era de Pablo I o Alejandro I. También añadió que este tipo de herramientas de medición siempre han sido valiosas y tratadas con cuidado.

La historia del compás se remonta a tiempos antiguos y este instrumento ha sido utilizado desde la antigüedad, incluyendo en Babilonia y Asiria.

Además, durante las excavaciones se encontraron unas 300 piezas individuales, incluidas juguetes de porcelana, platos, lámparas y figuritas decorativas, pertenecientes a los siglos 18 y 19.

Se ha confirmado la presencia del esquivo gato de las arenas en varios lugares salvajes al este de Arar, en la región de las fronteras septentrionales, Arabia Saudita. Así lo informa
Saudi Press Agency.

Este felino, que alguna vez estuvo en peligro de extinción, está experimentando un resurgimiento gracias a la creación de reservas naturales y a iniciativas de protección medioambiental.

Los gatos de arena se caracterizan por su pelaje que varía entre arena pálido y marrón grisáceo, con marcas distintivas en las patas y en las mejillas. Adaptados a las duras condiciones del desierto, estos animales excavadores son principalmente nocturnos y crepusculares, lo que les permite evitar el intenso calor diurno.

Nasser Al-Majlad, director de la Asociación Medioambiental Aman, destacó la rica biodiversidad de la región, que se beneficia de su variado terreno y abundante vegetación. Este esfuerzo por proteger al gato de las arenas subraya la importancia de la conservación de la fauna en los ecosistemas desérticos de Arabia Saudita.